4 ago 2020

Mis desmaquillantes

¡Muy buenas!

¿Habéis sobrevivido al calor? Desde luego, julio se ha ido por todo lo alto, al menos en lo que a temperaturas se refiere...

Hoy traigo una actualización de los productos para el desmaquillado que tengo en este momento. He llegado a acumular unos cuantos, y les voy dando uso en función del producto que necesite, pero cuando los termine, probablemente sólo repetiré con un par de formatos, los que mejor resultado me dan.

En la pequeña colección, sólo faltaría el clásico bifásico (con mezcla de aceite), pero desde que hace ya tiempo acabé el último, no me he vuelto a hacer con ninguno porque desde luego, desde que probé las mantecas desmaquillantes, prácticamente no uso otra cosa (principalmente para uso personal).    





* Las AGUAS MICELARES son los productos más suaves, se suelen usar con algún algodón o toallita de microfibra y retiran el maquillaje de forma superficial (aunque los hay bastante efectivos, como el de Sephora, que gasté hace un tiempo). 




Ahora mismo tengo estos de Yves Rocher y Bonté (me gusta más el primero), y los suelo llevar en el maletín, porque me suele resultar suficiente un disco de algodón o un bastoncillo humedecido en agua micelar para retirar el maquillaje que pueda llevar la clienta o corregir pequeñas imperfecciones que surjan en el delineado, por la caída de pigmento de las sombras o incluso en el contorno del delineado de labios. 

En todo caso, son un paso de desmaquillado suave o parcial, y necesitan de un segundo producto para limpiar bien la piel, sobre todo para la zona de los ojos (no retiran con tanta facilidad máscaras de pestañas ni productos resistentes al agua).


* La LECHE DESMAQUILLANTE es todo un clásico. Es un formato que casi todo el mundo ha tenido en casa pero que no siempre hemos sabido usar correctamente, y de hecho, cada vez lo elegimos menos frente a otro tipo de formatos que han ido surgiendo y que nos resultan más cómodos, rápidos o efectivos.




Actualmente sólo tengo esta de Grimas, y la suelo usar para deshacer maquillajes muy cargados, en especial de fantasía, efectos o bodypainting, para reblandecer el maquillaje antes de empezar a retirarlo. 

El secreto es aplicarlo con la piel seca y masajear en círculos, después retirarlo (preferentemente con toallita de moicrofibra humedecida) y seguir con los siguientes pasos de limpieza para que la piel quede impoluta.

No es un mal producto, y bien utilizado es agradable de aplicar y efectivo, aunque confieso que para diario (y con maquillajes muy suaves y naturales), prefiero otros formatos.


* El GEL DESMAQUILLANTE es en general menos conocido o utilizado. Funciona como la leche, aplicándolo en seco, masajeando la piel y retirándolo con toallita humedecida o algodón, sólo que el formato, al ser en gel, resulta algo más ligero y refrescante que la leche, que suele ser algo más espesa (aunque según la marca, no tiene por qué).

Sólo tengo este de Stage Line, especial para piel grasa/mixta, libre de aceites y con extracto de camomila.




Personalmente lo uso poco, y al igual que la leche, lo reservo para los maquillajes muy pesados o de fantasía. No me gusta usarlo en la zona de los ojos porque puede resultar algo agresivo si entra algo de producto, pero con el resto de la piel funciona perfectamente.


* Este GEL-ACEITE de Clarins es un producto bastante especial, bastante suave y agradable de utilizar, con un aroma muy sutil, apto para todo tipo de pieles y apto también para todas las zonas de rostro. 





Es un gel limpiador con aceite de marula y se usa igual que la leche o el gel (como ya he comentado, aplicando en seco y masajeando antes de retirarlo). En las especificaciones del producto, indica que basta aclararlo con agua, pero me resulta más efectivo si hago uso de una toallita de microfibra o una esponjita vegetal. Igualmente, yo siempre uso un limpiador facial después de cualquier tipo de desmaquillante para asegurar que la piel quede totalmente limpia.


* Los ACEITES DESMAQUILLANTES también se han hecho un hueco importante en el aseo diario de cada vez más personas. Son rápidos, suaves y efectivos.

Este de Deliplus (Mercadona) me gusta bastante y cunde lo suyo, ya que hace falta apenas una pequeña dosis para  un maquillaje de diario, más o menos suave. 



Yo lo uso principalmente para la zona de los ojos, no me resulta nada agresivo, y con el resto me basta para masajear ligeramente por el resto del rostro y los labios (aunque últimamente sólo uso bálsamo, ya que hay que llevar mascarilla y no me apetece usar color para no mancharla). 

En este caso, estos aceites se usan también en seco, se masajean y se retiran bastante bien con agua (y como ya he dicho, remato con un limpiador facial y no queda ni rastro de maquillaje o aceite).


* Los BÁLSAMOS DESMAQUILLANTES también tienen hoy día su público. Son una versión más compacta que los formatos en "leche" y funcionan de manera muy similar (volvemos al ya tan repetido "aplicar en seco, masajear y retirar con toallita de microfibra o algodón").

Únicamente he probado este de L´Oréal por el que sentía curiosidad. Es especial para pieles secas y/o delicadas.





Debo decir que al principio no me convenció pero con el uso diario le he ido cogiendo el gusto. Es muy suave, nada agresivo en los ojos y funciona bastante bien, pero debo decir que no es mi desmaquillante definitivo. Al fin y al cabo, al ser un bálsamo (sin aceite) no retira con total efectividad el maquillaje de ojos (máscara, delineados waterproof, etc), pero sí resulta muy respetuoso con la piel del rostro aún usándolo cada día.


* Y por último, las MANTECAS DESMAQUILLANTES, que se han hecho casi con el trono en cuanto a productos desmaquillantes se refiere. Para mi, son lo más efectivo y rápido para retirar el maquillaje. También se aplican en seco y se masajean, como casi todas las anteriores fórmulas, pero basta retirarlos con agua (así ahorramos algodones).

Esta ha sido mi última adquisición, el llamado "Desmaquillante sublime" de Flor de Mayo, una manteca limpiadora con mateca de karité y aceites varios (camomila, almendras dulces y oliva). El pack venía con una manopla de microfibra (que de momento he reservado).
Lo compré porque había leído buenas referencias y para probar si me resultaba tan efectivo como el de The Body Shop (mi favorito hasta el momento). 







La fórmula es totalmente compacta, muy cómoda para viajar. Se toma una pequeña cantidad, se masajea en seco y se retira con una toalla humedecida o con agua templada (según indica en las instrucciones).
Cuesta la mitad que el de TBS y es muy similar, funciona muy bien, lo único es que es algo más blando y oleoso (supongo que es lógico porque contiene varios aceites, o quizá se comporte así por el tremendo calor que está haciendo).



Y hasta aquí el repaso de hoy. ¿Habéis probado alguno de estos productos? ¿Cuál es vuestro favorito?

¡Nos vemos pronto!

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